domingo, 25 de noviembre de 2012

Luz en la obscuridad



Es probable que a lo largo de tu vida hayas notado que los problemas no parecen ser tan serios durante las horas del día; cuando estás en actividad y ocupada en tus labores. Pero al llegar la noche, en la oscurida
d de tu habitación las preocupaciones parecen agrandarse. Quizá te sucede porque por momentos se te olvida que Dios nunca duerme y que es soberano sobre tus asuntos tanto de día como de noche.

En el libro del profeta Daniel capítulo 2 se registra el momento cuando éste siervo del Altísimo recibió de Dios la revelación e interpretación de un sueño del Rey Nabucodonosor:

“Durante la noche, Daniel recibió en una visión la respuesta al misterio. Entonces alabó al Dios del cielo y dijo: ¡Alabado sea por siempre el nombre de Dios! Suyos son la sabiduría y el poder” (Daniel 2:19-20, NVI).

¡Tal vez estás enfrentando situaciones que te producen pérdida de sueño en la noche! Esos tiempos de oscuridad, Dios los usa para enseñarte a agarrarte fuertemente de Él y que le prestes atención. Él quiere compartir Sus secretos contigo: “Él revela lo profundo y lo escondido, y sabe lo que se oculta en las sombras. ¡En él habita la luz!” (Daniel 2:22).

Es importante que nunca cometas el error de enojarte con Dios por las cosas que te suceden o por las cosas que no suceden. Dice la Palabra de Dios en Isaías 45:9: “¡Ay del que contiende con su Hacedor!”

Permite que Dios use esos tiempos de oscuridad para darte los tesoros de las tinieblas y las riquezas guardadas en lugares secretos.
Él quiere enseñarte cosas grandes y ocultas que tú no conoces.

¡DIOS QUIERE QUE ENCUENTRES LUZ EN LA OSCURIDAD!

Te daré los tesoros de las tinieblas, y las riquezas guardadas en lugares secretos, para que sepas que yo soy el Señor, el Dios de Israel, que te llama por tu nombre (Isaías 45:3, NVI).

Tú encenderás mi lámpara; Jehová mi Dios alumbrará mis tinieblas (Salmos 18:28, RV60).

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