Preciosa reflexión por el inicio de año 2012.
En estos días muchos nos encontramos pensando, reflexionando, hablando y soñando sobre cómo podría ser nuestra vida “si yo tuviera o si yo pudiera ser o hacer”. Comenzamos por hacer una lista larga de resoluciones, nos decimos en Enero comenzaré una nueva dieta, haré ejercicios, tendré mas tiempo para la familia, para mis hijos, empezaré a ahorrar, a salir de mis deudas, a dejar de fumar, a no beber alcohol, entre otras cosas que nos prometemos.
En fin establecemos metas que a la vuelta de 30 días las abandonamos porque somos víctimas de las circunstancias, nos llenamos de excusas y descuidamos lo que es realmente importante. Luego de esto nos echamos a llorar, a gritar de rabia y desilusión porque no alcanzamos nuestras metas y a veces nos enojamos con Dios o pensamos que no es su voluntad.
Dios quiere que usted tenga éxito en todo lo que hace, en lo que emprende en la vida y en las relaciones.
¿Sabía usted que la vida que siempre ha deseado esta al alcance de su mano?
Cuando leemos el salmo 1:1-4: “Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los malvados, ni se detiene en la senda de los pecadores ni cultiva la amistad de los blasfemos, sino que en la ley del Señor se deleita, y día y noche medita en ella. Es como el árbol plantado a la orilla de un río que, cuando llega su tiempo, da fruto y sus hojas jamás se marchitan. ¡Todo cuanto hace prospera!”
El éxito en la vida no es por casualidad, así mismo si quieres hacer del 2012 el mejor año de tu vida no va a hacer por casualidad, es por causalidad.
Tú tienes que provocarlo con tus acciones, no basta con escribir los deseos o las metas. Alguien dijo: “El que le apunta a la nada a nada llega”.
¿A qué le estas apuntando en el 2012?
Quizás quieras iniciar un negocio, realizar un viaje en familia, casarte con la persona que amas, tener un hijo, comprar una casa, un automóvil… probablemente ganar mas dinero, como también ser un escritor, un cantante, un líder, un ministro del Señor. Tú eliges lo que quieres alcanzar, y lo puedes lograr si sigues la dirección de Dios, unido al compromiso, la perseverancia y la disciplina que incorporamos en nuestra vida.
Para hacer del 2012 el mejor año de tu vida debes entender lo siguiente:
1. Como dice el Salmo Uno, debes deleitarte en Dios. Saber que El te ha creado para el éxito y creer lo que El dice que tú eres, saber cual es tu identidad y cual es tu misión en el mundo. Entender la forma como El te ha diseñado.
Un niño pequeño le preguntó una vez a su Maestro:
¿Por qué el hombre había sido creado con dos ojos en lugar de uno
como era el caso de la nariz o la boca?
“El ojo izquierdo, le dijo, te sirve para mirar a los otros con amor
mientras buscas en ellos sus mejores cualidades.
El ojo derecho es para mirarte a ti mismo,
para conocerte mejor y poder desarrollarte”
2. Debes estar claro de lo que quieres. ¿Cuál es su visión? ¿Cuáles son sus metas? Si usted no tiene metas trabajará para otra persona que si las tenga. ¿Lo que yo quiero lograr esta alineado con la Palabra de Dios?
3. Evitar la postergación. Deja de decir mañana lo voy a hacer porque el mañana nunca llega, el mejor día para comenzar es hoy. Dile adiós a la pereza, al hacerlo le dices adiós a la pobreza, frustración y problemas. Las personas perezosas desean y se frustran porque los deseos no se convierten en realidad. Si quieres tener éxito hay que trabajar.
“Perezoso, ¿hasta cuándo has de dormir? ¿Cuándo te levantarás de tu sueño? Un poco de sueño, un poco de dormitar, y cruzar por un poco las manos para reposo; así vendrá tu necesidad como caminante, y tu pobreza como hombre armado.” Proverbios 6:9-11
4. Diseñar y ejecutar un plan de acción. Haz tus planes sencillos, medibles, alcanzables y retadores de manera que puedas ver la mano de Dios en todo lo que emprendes. No te compliques con muchas cosas por lograr en un año. Piensa por un momento cuales son las seis cosas que te gustaría lograr este año y esboza un plan para llegar a ellas. Esfuérzate y se valiente, las buenas intenciones no bastan hay que tomar acción.
Hoy es el mejor día para olvidar el 2011, atrás han quedado los sinsabores, las derrotas, los fracasos, e inclusive atrás quedaron los triunfos y las victorias, todo eso es ceniza, nos toca es avanzar hacia lo extraordinario, a luchar por lo verdaderamente importante.
Haga del 2012 el mejor año de su vida, deja de echarle la culpa a las circunstancias, a la crisis, al gobierno, a la gente y comienza a crear la vida que Dios diseño para ti.
A nombre de mi familia deseamos para ti un año cargado de alegría, triunfo y paz en todo lo que emprendas.
En amor y liderazgo,
Pedro Sifontes
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