Niños

¿Están perdidos los niños? Yo creo que sí (Proverbios 20:11; Romanos 3:10, 22, 23; Santiago 4:17; 1ª Juan 5:17) El evangelismo es una parte muy importante de la triple misión de la iglesia. Debemos alcanzar a los perdidos, jóvenes o ancianos. Necesitamos tratar el ministerio a los niños desde el punto de vista que algunos de ellos pueden morir y pasar la eternidad sin el Señor. Debemos hacer lo que se pueda para "dejar los niños venir" a Jesús.

Oración de transición: Si la iglesia cree que los niños están perdidos sin Cristo debe:

1. Orar

A. Orar por los niños

B. Orar por los obreros en la cosecha de los niños (Mateo 9:37, 38; Filipenses 1:4,5)

2. Poner en práctica lo que enseña

A. Poner un buen ejemplo para los niños (Mateo 7:27; Santiago 1:22)

3. Preparar

A. Preparar todo para tener un ministerio para niños

B. Preparar a personas para el ministerio a los niños

4. Proveer

A. Proveer finanzas para este ministerio

B. Proveer variedad de ministerios para ellos

C. Proveer un ambiente de amor sin condiciones (Juan 13:34)

5. Prevalecer

A. No desmayar en hacer el bien

B. No darse por vencidos con los niños difíciles (Efesios 4:32)

6. Proclamar

A. Proclamar el evangelio de Jesús (Jueces 2:10)

B. Proclamar la necesidad de ministerio de calidad para todo niño

C. Proclamar la necesidad de que toda la iglesia se envuelva en este ministerio (Romanos 1:16)

¡Permítanme hablar por los niños! Los que no conocen a Cristo como su Salvador pasaran la eternidad sin El. No se puede argumentar acerca de una edad de responsabilidad. Algunos niños comprenden la salvación a una temprana edad, otros no. Los niños crecen en su conocimiento del evangelio, pero si hay la posibilidad de que los niños mueran y entren a la eternidad sin Cristo, debemos presentarles el evangelio. Como congregación, comprometámonos a orar, practicar, preparar, proveer, prevalecer y proclamar. Deseemos como Cristo, "Dejad los niños venir". . . a Él.