Muévete

En la vida, nos toca tomar decisiones difíciles.  Una de ellas, el dejar atrás personas que nos rodean. 

No todo el que estuvo en tu pasado pertenece a tu presente, ni a tu futuro.  Debes saber qué personas son las que tienes que dejar atrás, por un momento dado, para alcanzar el propósito de Dios en tu vida.  Esto es muy importante, en el aspecto emocional, porque estas personas pueden crear la atmósfera incorrecta en tu vida. 

Con unas personas sientes gozo, alegría, pero hay otros que traen cargas a tu vida.  Es por esto, que es importante movernos.

En Génesis 12, Dios le hace una petición a Abraham: Que saliera de tu tierra, de tu parentela y de la casa de su padre.  Es interesante que Dios le hiciera la aclaración de que saliera de tres lugares: Su tierra, su parentela y de la casa de su padre.  Alguien se puede ir de su tierra, pero no irse de la influencia de la casa de su padre.  Hay quienes piensan que un cambio geográfico cambia todo su entorno emocional, y no es así.  Cuando Dios va a tratar contigo, te lleva más allá de las cosas que han causado una gran influencia en tu vida.  Si no eres capaz de despegarte de este entorno, limitarás lo que Dios va hacer contigo. 

Una de las promesas que Dios le da a Abraham es que engrandecería su nombre.  En el capítulo anterior, capítulo 11 del libro de Génesis, vemos que los hombres construyen la torre de Babel.  La razón principal por la cual Dios detiene este proyecto, es porque el fin de ellos era hacerse un nombre.  Sin embargo, Dios le dice a Abraham te voy a dar un nombre.  Es importante entender, que lo que tú no puedes hacer por ti mismo, Dios lo hará por ti, para que no seas tú llevándote la gloria.  Él no tiene ningún problema en que tu nombre sea grande.  El quiere que tu nombre sea grande porque él lo hizo grande y no tú por tus propias fuerzas. 

La biblia también nos relata que Dios confundió las lenguas a aquellos que trataron de hacer la torre de Babel.  La enseñanza es que todo esfuerzo natural que hagas para hacer lo que Dios quiere hacer contigo, te llevará a confusión.  Por eso Abraham tenía que salir del entorno de aquellos que trataron de hacerse un nombre. 

Abraham se atrasó 200 años en la instrucción que Dios le había dado, simplemente porque sale con familia. 

Muchas de las frustraciones que has experimentado han sido por estar con gente que no debería estar contigo.  ¿Cuántos Lot están junto a ti?  Es verdad que Lot es un buen recuerdo del pasado, pero no cabe en tu futuro.  Dios da instrucciones claras, para poder trabajar contigo.  

La tierra que Dios te va a dar no es como aquella a la que estás acostumbrado.  Lo que funcionó en el pasado, no necesariamente funciona en tu presente y en tu futuro.  Cuando estés emocional y espiritualmente preparado, entonces Dios podrá trabajar contigo.  Pero retrasar este despegue emocional confunde, atrasa y te hace cargar con gente que no va a estar en tu futuro. 

Tiene que llegar un momento en tu vida en que te decidas, y digas: Se acabó.  No continúo más con aquellos que me atrasan.  Muévete hacia adelante, para alcanzar lo que Dios te ha prometido.