jueves, 29 de diciembre de 2011
Mis más íntimos pensamientos
Comparte tus más íntimos pensamientos y sentimientos con Dios. Dile a Dios cualquier cosa que esté en tu mente y descarga en Él lo que sea que haya estado molestándote. Dios quiere acompañarte en el transcurso de tu vida. Pídele a Dios una confirmación de que Él está ahí. Pídele que use cada situación de tu vida para revelarte más de Él mismo.
Pídele a Dios que tome tu mano cuando necesites valor, y pídele que te asegure que tienes fuerzas todavía por descubrir y usar.
Agradécele a Dios por lo que ya hizo en tu vida y por lo que ya te reveló de Sí mismo. Quizá te gustaría incluir la siguiente oración en tu conversación con Dios.
Dios Padre, es difícil para mí decir esto, pero te doy gracias por hacerme como soy. Me veo a mí mismo y podría señalar varias áreas donde estoy tentado a creer que cometiste un error. Pero en lugar de eso estoy optando por creer que Tú me formaste desde el principio con un propósito y con placer, y que aún hasta las cosas que no me gustan de mí mismo están organizadas por Ti para mi bien, incluso hasta para bendecir a otras personas.
Muéstrame cómo puede ser esto una realidad para mí en forma personal.
Quiero acercarme a Ti, Señor. Ábreme los ojos para ver Tu corazón dirigido hacia mí. Ahí donde he sido herido o traicionado en el pasado… donde he hecho guardia en mi corazón contra Ti… Señor, sáname. Ayúdame a conocerte por quien eres Tú: mi Papi Dios. En el
nombre de Jesús, Amén.
Nos encanta ser amados, no sólo por lo que hacen por nosotros aquéllos que nos aman sino por la sensación especial que sentimos simplemente al saber que somos amados. Aunque los humanos sean capaces de lograr pasar por la vida sin ser amados personalmente por otros y sin sentir que otros se deleitan en uno, todos queremos ser amados. Esto no es ninguna casualidad, ni ninguna clase de evolución de nuestras emociones.
Fuimos hechos de esa manera por un Dios cuyo único propósito para crearnos fue el de tener con nosotros una relación duradera de amor y afecto de una forma recíproca. El más grande sello del toque de Dios desde el preciso comienzo del universo y a través de la eternidad, es el amor.
Esto es porque Dios es más que un mero sentimiento o una fuerza o una atmósfera de amor. Él es el amor personificado… el amor encarnado (1 Juan 4:8,16). Él es un Ser real cuyos atributos y personalidad sobrenaturales están casi más allá de la comprensión humana, pero es distinto y sin embargo confiable.
Dios no sólo es amor, pero de todos los elementos tangibles o intangibles de la experiencia humana, lo que es cierto del amor viene siendo lo más cercano a describir lo que es cierto de Dios. El amor ejemplifica las características esenciales de Dios. El amor define Su naturaleza, Sus motivos y Sus relaciones a través de todo el tiempo.
Por eso, Hoy quiero compartir mis más íntimos pensamientos con Mi Padre Celestial.
Señor, Gracias por amarme de tal manera que me inspiras la confianza para poder compartirte en oración mis íntimos pensamientos. En el Nombre de Jesús. Amén.
Pensamientos...
La omnisciencia Divina confronta la comodidad de la mente profana, pero al hijo de Dios lo desborda de consuelo. Dios siempre piensa en nosotros, él nunca desvía su pensamiento de nosotros, nos tiene siempre ante sus ojos y esto es precisamente lo que yo debiera hacer con él, jamás desviar mi pensamiento de él ya que sería terrible existir por un momento más allá de la observación del Padre celestial.
Sus pensamientos son siempre gratos, amorosos, sabios, prudentes, de largo alcance y traen beneficios incontables, es una deliciosa elección recordar sus pensamientos. El Señor siempre ha pensado en su pueblo y por ellos los eligió e hizo pacto de amor con ellos. Se que lo mismo a hecho conmigo y quiere deleitarme en sus pensamientos.
El pensamiento de Dios acerca de su pueblo es permanente y perseverante hasta llevarlos sin riesgo hasta el final del camino. En todos mis caminos la mirada vigilante del Padre eterno está sobre mi. Jamás podré tomar mi propio camino sin que su mirada de amor me persiga. En mis dolores él me observa intensamente y ningún dolor escapa de su tierna mirada.
El conoce todos mis cansancios y marca en su libro todas las batallas que he sostenido. Los pensamientos de Dios me comprenden en todas mis trayectorias y penetran la región íntima de mi ser. Ningún nervio, ningún tejido, válvula o músculo de nuestro cuerpo escapa de su control. Sus pensamientos grandes se acercan a mi mundo pequeño para llenarlo de su interés y amor.
Tiene todo esto significado para ti? No vale la pena tomar el sendero sucio de la tontería filosófica de quién predica un dios impersonal y habla de la materia como una personalidad existente y propia. El Señor vive y piensa en nosotros y esta es una verdad muy preciosa para mí que no la quiero dejar escapar, hoy quiero decir como el salmista: Cuán preciosos me son, Oh Dios, tus pensamientos, Cuán grande es la suma de ellos.
Señor, gracias porque hoy, puedo pensar en ti y meditar en lo precioso de tus pensamientos. Me llena y me satisface el corazón saber que tú piensas y te interesas en mi. Oh, Gracias Señor, cuán preciosa es la suma de tus pensamientos. La gente, los amigos y la familia me pueden olvidar, pero tu jamás me olvidas.
Quiero también hoy y siempre pensar en ti y que el mismo interés yo te lo pueda demostrar porque grande cosa es amarte y grande privilegio es pensar en ti. Caminar por el sendero de la vida meditando y pensando en tu amor es algo tan refrescante como el agua en el desierto.
Amén.
viernes, 23 de diciembre de 2011
El Señor No Me Dejará Ni Me Desamparará.
Estas palabras dirigidas a Josué se repiten muchas veces; son la base de aquellas otras del Nuevo Testamento: «Él dijo: No te dejaré ni te desampararé».
Querido lector, delante de nosotros se presenta una vida de combates, pero el Señor de los ejércitos está con vosotros.
¿Estamos llamados a conducir un pueblo numeroso e inconstante?
Esta promesa nos asegura toda la sabiduría y prudencia necesarias.
¿Tenemos que luchar con astutos y poderosos enemigos?
Aquí tenemos la fuerza y el valor y la victoria.
¿Tenemos que conquistar una rica herencia?
Tenemos una señal del éxito en nuestros propósitos: El Señor está con nosotros.
Sería una verdadera calamidad si Dios pudiera faltar a su palabra; pero como esto nunca podrá suceder, el viento de la inquietud se estrellará contra el muro de la
fidelidad divina.
El Señor nunca nos abandonará.
Suceda lo que suceda, Él velará a nuestro lado.
Los amigos nos desamparan y su auxilio es como lluvia de primavera; pero Dios es fiel. Jesús es el mismo eternamente y el Espíritu Santo mora en nosotros.
Ven, alma mía, cálmate y ten confianza.
Si las nubes se amontonan, el Señor las disipará.
Si Dios no puede ser infiel, tampoco mi fe se debilitará; y como Él no me desamparará, tampoco yo le desampararé. ¡
Sea siempre nuestra fe tranquila!
Hoy es una día para experimentar la seguridad de su compañía y su amor eterno.
Señor, Gracias por darme promesas como esta. Jamás podré decir que me siento desamparado porque tu estas a mi lado cobijándome con tu dulce amor. Amén.
miércoles, 21 de diciembre de 2011
Nunca es tarde
En 1977 pensaba que era una persona con éxito. Después de todo, poseía el 50% de un negocio muy exitoso. Tenía un doctorado. Estaba casado y tenía tres hijos. Pensaba que había hecho todo esto con mi propia capacidad y sabiduría. Parecía como si podría lograr hacer cualquier cosa si solamente trabajaba suficientemente duro. Mi conocimiento y la fortaleza de mi voluntad propia, mis títulos y mis éxitos en los negocios eran cosas muy importantes para mí, y los puse delante de cualquier otra cosa.
Pero mi hijo de 20 años tenía otras prioridades. Alan trató de compartir conmigo acerca de lo que Jesucristo significaba para él, pero yo estaba convencido que no necesitaba a Jesús. Como ingeniero químico, trato de probar o desaprobar la existencia de Dios, de la igual forma como pruebo reacciones químicas en el laboratorio. La conclusión de este examen había salido sin resultados, así es que ignoré a Dios.
Fue entonces cuando Alan se enfermó seriamente y fue llevado al hospital. Su corazón había cesado de latir. Me paré fuera de la sala de emergencia, luchando con el dolor y la angustia que estaba sintiendo, y el sentimiento de ser incapaz de hacer algo. Me di cuenta que no podía hacer nada. Mi hijo estaba luchando entre la vida y la muerte, y no había nada que pudiera hacer al respecto. Ni siquiera sabía cómo rezar.
Alan sobrevivió a un arresto cardíaco, pero se quedó en el hospital por un largo tiempo, sufriendo de una infección seria en la cabeza. Me dijo muy dulcemente:
- ” Sé que es el Plan de Dios. Si el propósito de Dios es que mi sufrimiento te lleve a conocerlo, entonces todo lo que estoy experimentando vale la pena”
¡Estaba asombrado! Junto a su cama, cada día me pedía que le leyera su Biblia. Por primera vez, empecé a aprender lo que la Biblia realmente era. Y empecé a aprender acerca de Jesús. La fe de Alan en Jesús, junto con lo que había leído en la Biblia me hizo entender que Jesús es real.
Un mes más tarde, le abrí el corazón a Cristo. Sabía que Dios quería que tuviera una vida con más significado. ¡Alan estaba muy contento cuando le conté acerca de mi nueva experiencia con Jesús! Había orado por mucho tiempo para que su padre pudiera saber acerca de la vida eterna.
Tres semanas después Alan entró en coma. Por tres días casi nunca abandoné mi lugar al lado de su cama, hasta que finalmente dejó su vida aquí en el mundo para estar con el Señor. Había esperado con ansia la oportunidad de compartir mi nueva vida con mi hijo. Sé que lo voy a ver de nuevo algún día. A pesar de que estamos apenados, Dios nos dio a mi esposa y a mí una paz y esperanza que sobrepasa todo entendimiento humano. La Biblia promete esto en Filipenses 4:7.
La Biblia dice en 2 Corintios 5:17 que si alguno está en Cristo, “nueva criatura es”. Las cosas viejas han pasado, y las nuevas han llegado. Esto es ahora la verdad de mi vida. Ahora, Dios es primero, en todo. Los principios con los cuales tomo decisiones también han cambiado completamente. Le pido a Dios que me ayude a hacer decisiones correctas en mis negocios y ya no dependo solamente de mi conocimiento.
Donde esta la felicidad
NO EN EL PODER MILITAR. Después de que Alejandro el Grande había conquistado el mundo hasta entonces conocido, lloró en frustración porque no había mas mundos que conquistar
.
NO EN EL PLACER. Lord Byron, quien vivió una vida de placeres y comodidad, escribió: “El gusano, el cáncer y la pena son sólo míos.”
NO EN LA INCREDULIDAD. Voltaire, el notorio incrédulo, escribió: “Desearía no haber nacido nunca.”
NO EN LA POSICIÓN Y EN LA FAMA. Lord Baconsfield disfrutó de las dos cosas en muy buena proporción, pero escribió: “La juventud es una equivocación; la adultez es una lucha; la vejez es una pena.”
entonces……¿DÓNDE ESTÁ LA FELICIDAD?….. La respuesta es simple:
Solamente en Cristo. Él dijo: “…y se gozará vuestro corazón, y nadie os quitará vuestro gozo.”Juan 16:22
…..y TU…..donde está tu felicidad????…
2 Corintios 2:14
Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento.
domingo, 18 de diciembre de 2011
La vasija agrietada
Durante dos años completos esto fue así diariamente, desde luego la vasija perfecta estaba muy orgullosa de sus logros, pues se sabía perfecta para los fines para los que fue creada. Pero la pobre vasija agrietada estaba muy avergonzada de su propia imperfección y se sentía miserable porque solo podía hacer la mitad de todo lo que se suponía que era su obligación.
Después de dos años, la tinaja quebrada le habló al aguador diciéndole:
“Estoy avergonzada y me quiero disculpar contigo porque debido a mis grietas sólo puedes entregar la mitad de mi carga y sólo obtienes la mitad del valor que deberías recibir.”
El aguador apesadumbrado, le dijo compasivamente:
“Cuando regresemos a la casa quiero que notes las bellísimas flores que crecen a lo largo del camino.” Así lo hizo la tinaja. Y en efecto vio muchísimas flores hermosas a lo largo del trayecto, pero de todos modos se sintió apenada porque al final, sólo quedaba dentro de sí la mitad del agua que debía llevar.
El aguador le dijo: ¿Te diste cuenta de que las flores sólo crecen en tu lado del camino?
Siempre he sabido de tus grietas y quise obtener ventaja de ello, sembré semillas de flores a todo lo largo del camino por donde tú vas y todos los días tú las has regado. Por dos años yo he podido recoger estas flores para decorar la casa de mi patrón. Sin ser exactamente como eres, él no hubiera tenido esa belleza sobre su mesa.
Cada uno de nosotros tiene sus propias grietas.
“Todos somos vasijas agrietadas, pero debemos saber que siempre existe la posibilidad de aprovechar las grietas para obtener buenos resultados.
“En la gran economía de Dios, nada se desperdicia”. Si sabes cuáles son tus grietas, aprovéchalas, y no te avergüences de ellas.
Si se lo permitimos Dios utilizará nuestras grietas para decorar la mesa de su Padre.”
Porque somos hechura Suya Creados en Cristo Jesus para buenas obras, las cuales Dios preparo de antemano para que anduviesemos en ellas.
Efesios 2>10.
ABC del Cristiano
Alaba a Dios en cada circunstancia de la vida.
Busca la excelencia, no la perfección.
Cuenta tus bendiciones en vez de sumar tus penas.
Devuelve todo lo que tomes prestado.
Encomienda a tres personas cada día.
Fíate de Dios de todo corazón y no confíes en tu propia inteligencia.
Gózate con los que gozan y llora con los que lloran.
Haz nuevos amigos pero aprecia a los que ya tienes.
Invita a Cristo a ser tu Señor y Salvador.
Jamás pierdas una oportunidad de expresar amor.
Lee tu Biblia y ora cada día.
Mantente alerta a las necesidades de tu prójimo.
No culpes a los demás por tus infortunios.
Olvida las ofensas y perdona así como Dios te perdona.
Promete todo lo que quieras; pero cumple todo lo que prometes.
Que se te conozca como una persona en quien se puede confiar.
Reconoce que no eres infalible y discúlpate por tus errores.
Sé la persona más amable y entusiasta que conoces.
Trata a todos como quisieras que te traten.
Únete al ejército de los agradecidos.
Vístete de misericordia, humildad y paciencia.
Y no te olvides de soportar a los demás como a ti te soportan.
Záfate de las garras seductoras de Satanás.
Y lo mejor llénate del amor de Dios, que todo lo puede y está dispuesto a amarte siempre
sábado, 17 de diciembre de 2011
Amor se escribe con P
El verdadero amor se escribe con “P”, porque para olvidar un mal recuerdo debe de existir PERDÓN antes que el odio entre a aquellos que se aman.
Amor se escribe con “P”… porque para obtener lo que deseas, debes de PERSEVERAR hasta alcanzar lo que te has propuesto.
El sincero amor se escribe con “P”… porque la PACIENCIA, el PERDÓN y la PERSEVERANCIA son ingredientes necesarios para que un amor perdure.
Porque amor es también…. una PALABRA dicha a tiempo…
Es el PERMITIRSE volver a confiar…
Es PERMANECER en silencio escuchando al otro…
Es esa PASIÓN, que nos llena de estrellitas los ojos al pronunciar el nombre del que amamos…
El amor se escribe con “P”… Porque son esas PEQUEÑAS cosas que nos unen al ser amado día tras día.
Existen la Fe, la Esperanza y el Amor, pero la más grande y la más importante de ellas es el Amor.
1 Corintios 13:4 (Reina-Valera 1960)
4 El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece;
“El fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, afabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, dominio de sí; contra tales cosas no hay ley.” -Gálatas 5:22-23
jueves, 15 de diciembre de 2011
Como tener éxito en el amor??
¿Cómo tener éxito en el amor?
La respuesta es dolorosa, dura, difícil, impactante, para muchos “novedosa”, y para otros parecerá una revelación directa del cielo, sin embargo la respuesta sigue siendo sencilla:
Para tener éxito en el amor tienes que amar, como Cristo te amó a ti.
Sin reservas, sin medidas, sin condiciones, sin límites, sin esperar nada a cambio, y sabiendo con resignación, que probablemente serás herido, serás rechazado, serás lastimado, y probablemente olvidado y abandonado. Sin embargo cuando amas como Cristo te amó a ti, terminas cosechando amor, un amor que el mundo no comprende, un amor celestial, amor que hasta (por si no lo sabias) ni los mismos ángeles del cielo conocen.
Ama con el amor de Cristo, amor sin límites, amor fiel, amor sincero, amor profundo, entrega total, pero amor responsable. Si Cristo no te amara tanto, ya te hubiera dado todo lo que le has pedido. No todo lo que creemos que es bueno, será para nuestro bien. Si Cristo no te amara tanto no te habría hecho esperar en muchas ocasiones a recibir lo que has pedido.
Dios ha establecido la ley de la siembra y la cosecha. Siembra amor, como el amor de Cristo, y no un amor humano, solamente emocional, o temporal, sino amor verdadero, y cosecharás hermosas lágrimas, heridas que duelen con alegría, decepciones que llenan el alma y la fortalecen. Ama con el Amor de Jesús y serás inmensamente feliz cuando seas insultado, calumniado, injuriado, y aun morirás con una sonrisa divina en tu rostro si entregas tu vida por haber amado como a ti te amó Cristo Jesús.
SI quieres tener éxito en el amor con tu pareja, amale con el amor de Cristo, seguramente serás decepcionado, pero cosecharás madurez y Dios quien ve tus lágrimas en secreto, te recompensará en público. Serás derribado, pero te levantarás y amarás de nuevo.
Si quieres tener éxito en el amor con tus hijos, parientes, amigos, amales con el amor de Cristo. Niégales sus caprichos, explicales, hazles esperar para recibir, cuando ellos no miran los peligros y piden o quieren cosas que tú sabes serán para su mal, no para su bien.
Amales y atrévete a ser malinterpretado, rechazado. Te llamaran canalla cuando no puedan vencer tu firmeza; te llamaran asesino cuando defendiéndolos tu derribes a sus feroces enemigos; te dirán que los has abandonado, cuando tú lo único que quieres es que esperen, y así crezcan, maduren y entiendan que el mundo no es color de rosa.
Te culparan de todos sus fracasos, te cargaran la culpa de todos sus errores, pero tu carga será ligera, porque tu cosechaste madurez, firmeza, fortaleza, vida eterna y un día verás un verdadero cambio en sus vidas y además es el mismo Jesús quien lleva tus cargas y cada vez que sientas los latigazos de la traición en tu espalda, sabrás que tu corazón está recostado en el pecho del mismo Cristo y serás aún más, por el, inmensamente amado.
Si amas con el amor de Cristo, no amas por ti mismo, es Cristo en ti, tú esperanza gloriosa, es la manifestación divina, amor de Padre, amor firme, y amor maternal: amor del Espíritu, quien sobre ti se posa cual graciosa paloma sobre tu hombro y te dice:
- Tú, sigue amando, porque también yo a ti, TE AMO….
“LA VERDADERA EXPRESIÓN DE LA NAVIDAD”
TEXTO BIBLICO: SAN MATEO 1: 18-22
INTRODUCCIÓN:
¿Qué es lo primero que se le ocurre a la gente cuando se anuncia la navidad?
• A los niños: ropa, juguetes, regalos, cohetes, luces.
• A los jóvenes: estrenos, fiestas, impresionar a la novia, bebida.
• A los adultos: aguinaldos, viajes, vacaciones, negocios, comidas.
Ahora bien, preguntémonos: ¿Será en realidad estepensamiento el que nos debe cautivar en esta época en que se celebra la Navidad?
¿CUÁL ES LA VERDADERA EXPRESIÓN DE LA NAVIDAD?
I. LA NAVIDAD EXPRESA LA MAS GRANDE HUMILLACIÓN: “DIOS SE HIZO HOMBRE”
A. Tal fue la humillación del Señor que no se hallo un lugar para que naciera cómodamente. San Lucas 2:7 expresa que no había lugar para el en el mesón. Nació en un pesebre que servia para alimentar ganado.
B. Tal fue la humillación del Señor que le toco huir a tierra extraña porque Herodes decidió matarle. (Mateo 2: 13)
II. LA NAVIDAD EXPRESA LA MAS GRANDE MANIFESTACIÓN DEL AMOR DE DIOS.
A. ¿Qué dice Juan 3: 16?
B. En su amor:
1. Dios vio a la humanidad perdida. (Romanos 3: 10-18)
2. Dios amo a la humanidad perdida. (Juan 3:16)
3. Dios Redimió a la humanidad perdida. (Gálatas 4: 4-5)
III. LA NAVIDAD EXPRESA LA MAS GRANDE DECISIÓN DEL HOMBRE.
A. Ante el hecho innegable que Jesús vino para salvar al hombre, se vuelve importante e indispensable que el hombre tome decisiones:
1. Rechazar. (Juan 3: 17-21)
2. Aceptar. (Romanos 10: 9-10)
CONCLUSIÓN:
¿De que manera has estado celebrando la Navidad en estos años pasados? ¿Con luces? ¿Con cohetes? ¿Con fiestas? ¿Bebidas?. Quiero decirte que nada de esto se dio en la noche en que Jesús nació. Lo que si resplandeció aquella noche fue la luz de Jesús para salvación a la humanidad.
Permite que en tu vida se celebre la verdadera expresión de la Navidad:
“JESÚS NACIENDO EN TU CORAZÓN”
Hoy puede ser Navidad para ti si tan solo permites que Jesús nazca en tu corazón.
Cuando los sueños se demoran
¿Tienes sueños que aún no se han cumplido? ¿Anhelas algo con todo tu corazón y Dios todavía no te lo ha dado?
No eres el único, todos tenemos algo, por lo menos una cosa, que nuestro corazón desea apasionadamente pero que aún Dios no nos ha concedido.
Elcana tenía dos esposas: Penina y Ana. La segunda no tenía hijos y por eso Penina se burlaba de ella. Cada año, mientras iban al tabernáculo sucedía lo mismo y Ana se sentía tan mal que inclusive dejaba de comer.
Un día, después de ofrecer sacrificio Ana se levantó y fue a orar y con gran angustia derramó su corazón delante de Dios. El relato dice que no salían palabras audibles de la boca de Ana y que inclusive Elí, el sacerdote, pensó que ella estaba ebria y la reprendió.
¿Alguna vez has pasado por algo así? ¿Te has sentido tan triste que no puedes ni proferir palabras? Inclusive cuando intentas orar no encuentras cómo dirigirte a Dios porque aquello que te sucede te duele tanto que las lágrimas son lo que mejor expresa lo que sientes.
La gente no comprende lo que te sucede, por más que les expliques no llegan a entender el dolor que estás atravesando y, aunque tratan de consolarte, no hay nada que alivie tu pesar. Tal vez es porque los sueños son personales y cada uno sabe el valor que tienen. Inclusive para Elcana era difícil comprender por qué Ana se deprimía tanto por no tener hijos.
Y claro, no faltan las Peninas que siempre saben cómo poner el dedo en la llaga y se ocupan de recordarte aquello que no has logrado todavía, aquella oración que aún no ha sido contestada.
Pero Ana, fue al tabernáculo y derramó su corazón delante de Dios, ¿Habrá un mejor lugar? ¿Habrá alguien que te entienda como Él?
El relato continúa diciendo que una vez que Ana le explicó a Elí lo que sucedía él le dijo: “… Ve en paz, y el Dios de Israel te otorgue la petición que le has hecho. Y ella dijo: Halle tu sierva gracia delante de tus ojos. Y se fue la mujer por su camino, y comió, y no estuvo más triste. Y levantándose de mañana, adoraron delante de Jehová….” (1 Samuel 1:17- 19)
Te invito a seguir el ejemplo de Ana. Presenta tu petición delante de Dios, derrama tu corazón en Su presencia. ¿Quién más podría entenderte y consolarte? ¿Quién más puede cumplir los anhelos que tienes?
Si ya lo hiciste levántate y no estés más triste, ve y adora a Dios. Y espera que Él no deshecha nuestras peticiones y te dará lo que tanto anhelas.
Receta para un matrimonio exitoso
En un esfuerzo por hacer uso de las experiencias de aquellos que han vivido juntos con éxito como marido y mujer, les pedimos a varias parejas casadas que participaran en un estudio informal. Más de seiscientas personas estuvieron de acuerdo en hablar con franqueza a la generación más joven acerca de los conceptos y métodos que han dado resultado en sus hogares. Cada una de ellas escribió comentarios y recomendaciones que se analizaron y compararon cuidadosamente.
El consejo que ofrecieron no es nuevo, pero ciertamente representa un gran lugar para comenzar. Al intentar aprender cualquier tarea, se debe comenzar por los conceptos fundamentales, aquellos pasos iniciales a partir de los cuales todo lo demás se desarrollará más adelante. En este espíritu, nuestro panel de seiscientas personas ofrecieron tres recomendaciones probadas y comprobadas, fundamentales, con las que probablemente ningún cristiano consagrado estaría en desacuerdo.
Un hogar centrado en Cristo
Primero, el panel sugiere que los recién casados deben establecer y mantener un hogar centrado en Cristo. Todo lo demás descansa sobre ese fundamento. Si un esposo y una esposa jóvenes están profundamente comprometidos con Jesucristo, ellos disfrutan de enormes ventajas sobre la familia que no tiene una dimensión espiritual.
Una vida de oración significativa es esencial para mantener un hogar centrado en Cristo. Por supuesto, algunas personas usan la oración de la misma manera en que siguen sus horóscopos, buscando manipular un “poder más elevado” no identificado a su alrededor. Uno de mis amigos admite en broma que él pronuncia una oración cada mañana de camino al trabajo cuando pasa por la tienda de rosquillas Él sabe que no es saludable comer esos pastelitos llenos de grasa, pero le encantan. Por lo tanto, le pide al Señor permiso para que él se dé su gusto cada día.
Él dice: “Señor, si es tu voluntad que me coma una rosquilla esta mañana, permite que haya un lugar de estacionamiento disponible en algún lugar cuando le dé la vuelta a la cuadra”. Si no hay un lugar para su automóvil, él vuelve a darle la vuelta a la cuadra y ora de nuevo.
Shirley y yo hemos llevado nuestra vida de oración con un poco más de seriedad. De hecho, esta comunicación entre nosotros y Dios ha sido el factor estabilizador a lo largo de nuestros muchos años de vida de casados. En las buenas, en las malas, en momentos de angustia y en períodos de alabanza, hemos compartido este maravilloso privilegio de hablar directamente con nuestro Padre celestial. ¡Qué concepto! No se necesita de una cita para entrar en Su presencia. No tenemos que pasar por Sus subordinados ni tenemos que sobornar a sus Secretarias. Él simplemente está allí, siempre que nos inclinemos ante Él. Algunos de los momentos más destacados de mi vida han ocurrido durante estas sesiones íntimas con el Señor.
Nunca olvidaré el momento cuando nuestra hija acababa de aprender a manejar. Danae había estado inscrita en la Escuela de Conductores Kamikaze, y finalmente llegó el momento para que ella hiciera su primer viaje sola en el automóvil de la familia. Créanme, mi nivel de angustia estaba subiendo hasta el máximo ese día.
Algún día ustedes sabrán cuán aterrador es darle las llaves del automóvil a una muchacha de dieciséis años que no sabe lo que no sabe acerca de conducir. Shirley y yo nos quedamos temblando en el patio de entrada mientras que Danae se nos perdía de vista. Entonces volvimos al interior de la casa, y yo dije: “Bueno, querida, Jehová dio y Jehová quitó”.
Afortunadamente, Danae llegó a casa a salvo en unos cuantos minutos y detuvo el automóvil de manera cuidadosa y controlada. ¡Ése es el sonido más dulce del mundo para un padre o madre angustiado!
Fue durante esta época, cuando vivíamos en el sur de California, que Shirley y yo hicimos un pacto entre nosotros de orar por nuestro hijo y por nuestra hija al final de cada día. No sólo estábamos preocupados por le riesgo de un accidente automovilístico, sino que también estábamos conscientes de muchos otros peligros que acechan en una ciudad como Los Ángeles, California.
Esa parte del mundo es conocida como la tierra de los tipos raros, de los chiflados, y de los locos. Ésa es una razón por la que nos encontrábamos de rodillas cada noche, pidiendo la protección divina de nuestros adolescentes a quienes tanto amábamos.
Una noche estábamos particularmente cansados y caímos en nuestra cama sin hacer nuestra oración. Estábamos ya casi dormidos cuando la voz de Shirley irrumpió en la noche. “Jim”, dijo, “todavía no hemos orado por nuestros hijos. ¿No crees que debemos hablarle al Señor?”
Admito que me fue difícil sacar mi armazón de 1,85 m de estatura fuera de mi tibia cama esa noche. Sin embargo, nos pusimos de rodillas y ofrecimos una oración por la seguridad de nuestros hijos, poniéndolos una vez más en las manos del Señor.
Más tarde supimos que Danae y una amiga habían ido a un restaurante de comida rápida donde habían comprado hamburguesas y refrescos. Condujeron por la pista unos cuantos kilómetros para comer cuando un policía pasó con su patrulla, iluminando con su reflector en todas direcciones. Obviamente estaba buscando a alguien, pero lentamente se fue.
En unos cuantos minutos, Danae y su amiga escucharon un golpe fuerte debajo del automóvil. Nerviosamente se miraron la una a la otra y sintieron otro golpe agudo. Antes que pudieran partir, un hombre se arrastró desde debajo del automóvil y emergió por el lado del pasajero. Tenía mucho pelo, y se veía como que había estado en las calles por semanas. De inmediato, el hombre fue a la puerta y trató de abrirla. Gracias a Dios, estaba con el seguro puesto. Rápidamente, Danae encendió el automóvil y arrancó, sin duda a una velocidad récord.
Más tarde, cuando verificamos la hora de este incidente, nos dimos cuenta de que Shirley y yo habíamos estado de rodillas en el preciso momento del peligro. Nuestras oraciones fueron contestadas. ¡Nuestra hija y su amiga estaban a salvo!
Me es imposible exagerar en cuanto a la necesidad de oración en la trama de la vida familiar. Por supuesto, no simplemente como un escudo contra el peligro. Una relación personal con Jesucristo es la piedra angular del matrimonio, dándole significado y propósito a cada dimensión de la vida. El poder inclinarse en oración al inicio o al final del día permite expresar las frustraciones y preocupaciones que de otro modo no podrían ventilarse.
Al otro extremo de esa línea de oración, hay un amoroso Padre celestial que ha prometido escuchar y responder a nuestras peticiones. En estos días en que las familias se desintegran por todos lados, no nos atrevemos a intentar hacer las cosas por nuestra cuenta.
El compromiso
¿Qué harían ustedes si tornados inesperados rugieran a través de su hogar, o el mar completamente calmo dejara las velas de su embarcación caídas y silenciosas? ¿Empacarían sus cosas y se irían a la casa de su mamá? ¿O pondrían mala cara, llorarían y buscarían maneras de devolver el golpe? ¿O su compromiso los mantendría firmes?
Se deben formular estas preguntas ahora, antes que Satanás tenga una oportunidad de meter su lazo de desaliento alrededor del cuello de usted. Levanten la quijada y aprieten los puños. Jamás se debe permitir que nada que no sea la muerte se interponga entre ustedes dos. ¡Nada!
Esta actitud determinada es lo que falta en tantas relaciones matrimoniales de hoy. Leí acerca de una ceremonia de casamiento en Nueva York hace unos cuantos años, en el que la novia y el novio prometieron “estar juntos en tanto que se amaran”. Dudo que su matrimonio haya durado hasta ahora.
El sentimiento de amor es simplemente demasiado efímero como para mantener una relación unida por mucho tiempo. Viene y se va. Ésa es la razón por la que nuestro panel de seiscientas personas fue categórico en este punto. Ellas han vivido lo suficiente como para saber que un compromiso matrimonial débil inevitablemente terminará en divorcio.
La comunicación
Otra recomendación que hizo nuestro panel es un ingrediente básico para un buen matrimonio: la buena comunicación entre el esposo y la esposa. Este tema ha sido tratado en forma extensiva por autores de libros sobre el matrimonio, así que yo lo trataré en forma breve. Sin embargo, me gustaría ofrecer unos cuantos pensamientos menos trillados sobre la comunicación en el matrimonio, que podrían ser útiles para las parejas casadas jóvenes.
Primero, se debe entender que los hombres y las mujeres difieren en una manera que a menudo no se menciona. La investigación pone en claro que las niñitas son bendecidas con una mayor habilidad lingüística que los niñitos, y éste es un talento que dura toda la vida. Dicho de manera simple, ella habla más que él.
Al ser adulta, la mujer generalmente expresa sus sentimientos y pensamientos mucho mejor que su esposo, y a menudo se irrita por la reticencia de él. Dios le puede haber dado a ella 50.000 palabras por día, y a su esposo, sólo 25.000. Él viene a casa habiendo ya usado 24.975 palabras, y sólo se comunica con gruñidos en la noche. Tal vez se enfrasque en el partido de fútbol americano del lunes por la noche, mientras que su esposa se muere por gastar las 25.000 palabras que le quedan a ella.
La famosa escritora Erma Bombeck se quejó acerca de esta tendencia de los hombres de enfrascarse en los deportes por televisión mientras que sus esposas están sedientas de compañerismo. Incluso propuso que se pasara una nueva ordenanza que se llamaría la “Ley de Bombeck”. De acuerdo a esta “ley”, a un hombre que haya mirado 168.000 partidos de fútbol americano en una sola temporada podía declarársele legalmente muerto. Todas las que están a favor digan “Sí”.
La complejidad de la personalidad humana garantiza que habrá excepciones para cada generalización. Pero las mujeres tienden a hablar más que los hombres. Todo consejero matrimonial entendido sabe que la incapacidad o la indisposición de los esposos a revelar sus sentimientos a sus esposas es una de las quejas comunes de las mujeres.
Casi se puede afirmar como un absoluto: Muéstrenme a un esposo callado y reservado, y yo les mostraré una esposa frustrada. Ella quiere sabe lo que él piensa y lo que pasó en su oficina, y cómo ve a los niños y, especialmente, cómo se siente con respecto a ella. El esposo, por el contrario, encuentra que es mejor no hablar de ciertas cosas. Es una lucha clásica.
La paradoja es que una mujer muy emocional y comunicativa a veces se ve atraída por el tipo de hombre fuerte y silencioso. Él parecía tan seguro y “controlado” antes que se casaran. Ella admiraba su naturaleza imperturbable y su serenidad en una crisis.
Luego se casaron y el punto débil de su gran fortaleza se hizo obvio. ¡No hablaba! Entonces ella rechinó los dientes durante los siguientes cuarenta años porque su esposo no podía darle lo que ella necesitaba de él. Simplemente no estaba en él.
El compositor y cantante Paul Simon escribió una canción titulada “I Am a Rock” (“Soy una roca”), la cual expresa el sentimiento de un introvertido silencioso. La persona de la que habla la canción ha sido herida y se ha retraído en sí misma como protección. Al leer estas palabras, imaginen los problemas de comunicación especiales que el tal hombre y su pobre esposa experimentarían en el matrimonio.
Un día de invierno En un diciembre profundo y oscuro Estoy solo,
Mirando por la ventana A las calles de abajo
Cubiertas de un velo de nieve que acaba de caer.
Soy una roca.
Soy una isla.
He construido paredes,
Una fortaleza profunda y poderosa,
Que nadie puede penetrar.
No necesito de la amistad
La amistad causa dolor
La risa y el amor son lo que yo desdeño
Soy una roca.
Soy una isla.
No hablen de amor;
Ya hemos oído la palabra antes;
Está durmiendo en mi memoria.
No perturbaré el sueño de sentimientos que han muerto.
Si nunca hubiese amado nunca habría llorado.
Soy una roca.
Soy una isla.
Tengo mis libros
Y mi poesía para protegerme;
Estoy protegido por mi armadura,
Escondido en mi habitación
A salvo dentro de mi matriz.
No toco a nadie ni nadie me toca a mí.
Soy una roca
Soy una isla.
Y una roca no siente dolor;
Y una isla jamás llora.
© 1965 Paul Simon. Usado con permiso.
Desdichadamente, las esposas y los hijos de las rocas y de las islas sí sienten dolor, ¡y lloran! ¿Pero cuál es la solución a semejantes problemas de comunicación en el hogar? Como siempre, involucra llegar a un acuerdo. Un hombre tiene una clara responsabilidad de “alegrar a la mujer que tomó” (Deuteronomio 24:5). No debe proclamarse a sí mismo “una roca” que nunca se permitirá volver a ser vulnerable. Él debe presionarse a abrir su corazón y compartir sus sentimientos más profundos con su esposa. Debe apartar tiempo para conversaciones significativas. Hacer caminatas, salir para tomar desayuno y andar en bicicleta los sábados por la mañana son cosas que promueven la conversación y mantienen el amor vivo. La comunicación puede ocurrir inclusive en familias en donde el esposo se inclina hacia adentro y la esposa se inclina hacia afuera. En estos casos, creo yo, la responsabilidad fundamental para llegar a un acuerdo radica en el esposo.
Por otro lado, las mujeres deben entender y aceptar el hecho de que algunos hombres no pueden ser lo que ellas quieren que sean. En mi libro titulado What Wives Wish Their Husbands Knew About Women. (Lo que las esposas desean que los maridos sepan sobre las mujeres), hablé sobre esta necesidad de parte de las esposas de aceptar la realidad tal como se les presenta.
¿Puede usted aceptar el hecho de que su esposo nunca podrá satisfacer todas sus necesidades y aspiraciones? Rara vez un ser humano puede satisfacer cada uno de los anhelos y esperanzas que otra persona alberga.
Obviamente, esta moneda tiene dos caras: Usted tampoco puede ser la mujer perfecta para su esposo. Él no está más equipado para resolver toda la gama de necesidades emocionales que tiene usted, de lo que usted misma está capacitada para ser la máquina sexual de los sueños de él cada veinticuatro horas. Ambos tienen que conformarse con las flaquezas y las fallas humanas, la irritabilidad y la fatiga, y los ocasionales “dolores de cabeza” que atacan de noche.
Un buen matrimonio no es aquel en el que reina la perfección: Es una relación en la que una perspectiva saludable no hace caso de una multitud de cosas “no solucionables”. Gracias a Dios, ¡mi esposa, Shirley, ha adoptado esta actitud hacia mí!
Me preocupa especialmente la madre de niños pequeños que elige no trabajar fuera del hogar, y es ama de casa a tiempo completo. Si ella ve a su esposo como la persona que le proveerá toda la conversación adulta que necesita, y como alguien que satisfará todas sus necesidades emocionales, su matrimonio puede encallar rápidamente. Él regresará a casa del trabajo agotado y con la necesidad de “tranquilidad”, como mencionamos anteriormente.
En vez de ello, encuentra a una mujer que está hambrienta de atención y apoyo. Cuando ella ve en los ojos de él que no le queda nada que dar, entonces es el comienzo de dolores. Ella se deprime o se enoja (o ambas cosas), y él no tiene ni idea de cómo poder ayudarla. Yo comprendo esta necesidad femenina y he intentado expresársela a los hombres.
Sin embargo, la dependencia total de una mujer en un hombre ejerce demasiada presión sobre la relación matrimonial, la cual se puede agrietar bajo la tensión.
¿Entonces qué se puede hacer? Una mujer con un rango normal de necesidades emocionales simplemente no puede pasarlas por alto. Estas necesidades gritan por ser satisfechas. De manera consecuente, desde hace tiempo les he recomendado a las mujeres que se encuentran en esta situación, que busquen complementar lo que sus esposos les pueden dar, cultivando amistades significativas con otras mujeres.
Tener amigas con quienes hablar de corazón a corazón, con quienes estudiar las Escrituras, y con quienes compartir técnicas de cuidado infantil puede ser vital para la salud mental. Sin este apoyo adicional, la soledad y la baja autoestima pueden acumularse y comenzar a sofocar el matrimonio hasta la muerte.
Esta solución de compañía femenina parece tan obvia que uno podría preguntarse por qué incluso vale la pena sugerirla. Desdichadamente, no es tan fácil de implementar. A menudo, una mujer debe buscar amigas hoy en día. Hemos sido testigos de un desmoronamiento en las amistades entre mujeres en los últimos años.
Hace cien años, las esposas y las madres no tenían que buscar amistades femeninas. Era algo que estaba programado dentro de la cultura. Las mujeres envasaban la comida juntas, lavaban la ropa juntas en el arroyo, y cooperaban en las obras de caridad de la iglesia juntas.
Cuando los bebés nacían, la nueva madre era visitada por tías, hermanas, vecinas y mujeres de la iglesia que venían a ayudarla a cambiar los pañales, alimentar y cuidar al niño. Existía un sistema de apoyo automático que rodeaba a las mujeres y que hacía la vida más fácil. La ausencia de este sistema de apoyo rápidamente se traduce en conflicto matrimonial y puede llevar al divorcio.
A toda esposa joven que está leyendo estas palabras, la insto a que no permita que esta situación le acontezca. Invierta algo de tiempo con sus amigas, aunque esté muy ocupada. Resista la tentación de encerrarse entre las cuatro paredes de su hogar y de esperar que su esposo lo sea todo para usted. Como familia, involúcrense en una iglesia que satisfaga sus necesidades y que predique la Palabra.
Esposas, recuerden que están rodeadas de muchas otras mujeres con sentimientos similares. Encuéntrenlas, preocúpense por ellas, compartan con ellas. Y en el proceso, su propia autoestima se elevará. Cuando estén satisfechas con sus vidas, sus matrimonios florecerán.
Suena simplista, pero así es como estamos hechos. Estamos diseñados para amar a Dios y para amarnos los unos a los otros. La privación de cualquiera de estas funciones puede ser devastadora.
Los obstaculos
Hace mucho tiempo, un rey colocó una gran roca obstaculizando un camino.
Luego se escondió y observó para ver si alguien quitaba la roca.
Algunos de los comerciantes más adinerados del reino y cortesanos pasaron por el camino, y simplemente giraron y pasaron al lado de la roca.
Muchos culparon al rey ruidosamente de no mantener los caminos despejados, pero ninguno hizo algo para sacar la piedra del camino.
Luego pasó un campesino con una carga de verduras.
Al aproximarse a la roca, el campesino puso su carga en el piso y trató de mover la roca a un lado del camino.
Después de empujar y fatigarse mucho, lo logró.
Mientras recogía su carga de vegetales, vio una bolsa en el suelo, justo donde había estado la roca.
Abrió la bolsa y, dentro de ella, encontró una cartera que contenía muchas monedas de oro y una nota del mismo rey indicando que el oro era para la persona que removiera la piedra del camino.
El campesino aprendió lo que los otros nunca entendieron.
Cada obstáculo presenta una oportunidad para mejorar, si se actúa en vez de quejarse.
Romanos 8:28 “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien.”
No permitas que los obstáculos que se te presenten el dia de hoy se salgan con la suya, al contrario mira más allá y sácales provecho.!
lunes, 12 de diciembre de 2011
Cuatro leyes de la Bendición de Dios
Te Bendeciré y en ti Serán benditas las Familias de La tierra. Génesis 12:2
Durante esta época mantén en mente Las Cuatro Leyes de la Bendición de Dios.
1. PRIMERA LEY. Nuestras bendiciones deben fluir a otros. La Biblia nos enseña que cuando somos bendecidos no es solo para que nosotros nos sintamos bien, felices y confortables, pero para que bendigamos a otros. Cuando Dios bendijo a Abraham en Génesis 12 le dijo: “ Te bendeciré y tú serás de bendición a otros”. Esta es la primera ley de la Bendición…y es que a Bendición debe fluir.
2. SEGUNDA LEY. Cuando Nosotros Bendecimos a otros, Dios tomará cuidado de nuestras necesidades.
Eso lo promete Dios. El se encargará de nuestras necesidades. No hay nada que Dios no hará a favor de aquel que ayuda a otros. De hecho, Dios garantiza esta bendición. Lucas 18 dice: “Les garantizo esto. Quien da alguna cosa para el Reino de Dios ciertamente recibirá muchas veces más en esta vida y la Vida eterna en el mundo venidero”
Cuando usted se preocupa por ayudar a otros, Dios asume la responsabilidad de tus problemas y eso es una bendición real, porque él sabe manejar tus dificultades más de lo que tu puedes.
3. TERCERA LEY. Nuestras Bendiciones compartidas con otros retornan a nosotros.
Mientras más bendices a otros, mientras más ayudas a otros, más bendiciones de Dios vienen sobre ti. Lucas 6:38 dice : “ Dad y Se os dará , medida buena”. Acá nos dice que no simplemente se nos dará de regreso sino con bono extra y bendición extra. Usted no le puede ganar a Dios. Mientras más trata usted de bendecir a otros alrededor tuyo, Dios entonces dirá: Voy a derramar más bendiciones sobre ti. Vamos a jugar un pequeño juego. Veamos quien de los dos da más. Mientras tú bendices a otros yo me encargaré de retornar sobre ti la bendición”.
4. CUARTA LEY. Cuando Dios te retorna la Bendición, Dios espera que de la misma manera bendigas a otros otra vez..
Jesús dijo en Lucas 12 que a quién mucho se le da, mucho se le exige. Al recibir de Dios nuestra responsabilidad es más grande.
Basándonos en las bendiciones que ya has recibido hasta hoy. Qué es lo que crees que Dios espera de ti?
domingo, 11 de diciembre de 2011
Renovar mi vida sexual
Cantares 1: 2 Dios creó al ser humano incluyendo el sexo, está diseñado para que lo disfrutemos, “no es del diablo” sino Su creación. No es verdad que “ya sabemos todo acerca del tema” porque, tal como queremos madurar en otras áreas de nuestra vida, debemos hacerlo en el área sexual. Y no se trata de aprender una serie de pasos o técnicas (que en cualquier libro de sexualidad se pueden leer o consultando a un sexólogo o médico) sino de conocer un proceso que involucra actitudes, pensamientos y sentimientos. Las mujeres no podemos dejar de lado el sexo, debemos crecer en conocimiento y madurar en ese proceso. Si fuera algo malo o negativo, Dios no lo habría creado. |
Algunos conceptos erróneos acerca de la vida sexual.
1-El cuerpo es malo y sucio.
Debemos desterrar este concepto. Creemos que “ya no es así”, “no se cree eso”, pero pregunto: ¿Alguna vez admiraste o te enorgulleciste de tus genitales? ¿Alguna vez le diste gracias a Dios por tu vagina?
Le damos gracias al Señor por los ojos (o por otra parte del cuerpo) pero no por la vagina. Aún nos queda el concepto de que es una parte “medio chancha” y no la miramos porque “no lo merece.” Si no estamos orgullosos de nuestro cuerpo es porque, en el fondo, creemos que “no es bueno”, y no lo cuidamos y lo escondemos.
Dios creo todas las partes de mi cuerpo y son buenas.
2- Los hombres tienen necesidades sexuales y las mujeres no.
¡Eso es mentira! Hay miles de mujeres que dicen: “Yo lo hago para darle el gusto a él,
para que no se vaya con otra, pero en realidad, me da lo mismo.”
En una encuesta realizada, a ambos sexos, se preguntó “qué era lo que más los excitaba.” Los hombres dijeron: “Viendo películas pornográficas”, y las mujeres: “viendo cuerpos desnudos pero en escenas románticas.”
Los investigadores decidieron probar si era verdad y analizaron sus reacciones, y resultó que el cuerpo de las mujeres también se excita con películas pornográficas, pero que, “mientras su cuerpo decía “sí”, su mente decía que “no”.
Fisiológicamente las mujeres tenemos los mismos deseos y necesidades que los hombres, pero la mayor complicación está en la mente.
Debemos lograr que la mente y el cuerpo coincidan, y digan lo mismo.
¿Y cómo hacemos para que se pongan de acuerdo mente y cuerpo?
Todos los conflictos sexuales son fáciles de resolver pero da pudor hablarlos. Hay mujeres que sienten dolor en sus relaciones sexuales, por vaginismo, etc., y estos síntomas aparecen cuando el cuerpo dice “sí” y la mente “no”. Y cuando dice que “no”, por más que el cuerpo quiera, no se logrará nada, por eso hay que trabajar la mente.
El sexo es energía. En una relación sexual se mueven muchas cosas y, al no practicarla, hay que sublimar esa energía.
Las viudas, solteras, todas aquellas mujeres que no tienen pareja, deben sublimar esa energía con otras actividad (tejer, estudiar, pintar, hacer gimnasia), porque si se quedan todo el día en sus casas, sin hacer nada, se sentirán mal.
Y las “bien casadas” (¡no pueden tener sexo una vez cada tanto!) deben practicarlo.
¿Por qué el cuerpo no coincide con la mente?
Muchas veces por:
1) experiencias sexuales negativas en el pasado: abuso, violación, agresión,
2) pertenecer a familias en las que no se hablaba del tema,
3) ir a una iglesia donde enseñan que la vida sexual es pecado y trasmiten culpa: “no tengas sexo con tu marido inconverso” Así te obsesionas y, por más que fisiológicamente tu cuerpo está bien, apto, preparado y dice que “sí”, la mente dice “no”.
4) tener un marido agresivo, sucio, desapasionado, que te hace sentir como un objeto, usada, y aunque el cuerpo pueda decir “sí”, la mente dice “no”.
5) utilizar el sexo como manipulación. Le dice a su pareja: “Si me das esto, entonces te doy sexo; si no me lo das, esta noche no pasa nada” (colocándose ella misma como objeto o en un juego mecánico.)
Debemos intentar todo lo que esté a nuestro alcance para que el cuerpo coincida con la mente.
3- El orgasmo simultáneo.
Éste es otro concepto erróneo, dice que “la pareja se lleva bien sexualmente cuando los dos llegan al orgasmo en el mismo momento”, y ese es un mito.
En una encuesta realizada, se descubrió que sólo el 25 % de las mujeres alcanzan el orgasmo a través de la penetración, el 75 % necesita estimulación adicional del clítoris; el 11 % son mujeres anorgásmicas y el 1% son multiorgásmicas (que pueden tener varios orgasmos sucesivos.)
Una mujer puede ser anorgásmicas por no conocer que tiene un clítoris y su esposo no la estimula porque busca el propio placer y no la tiene en cuenta.
Si a todas estas causas de falta de placer, le agregamos el mito del “orgasmo simultáneo”, se le añadirán más conflictos a la mente.
Si en una relación sexual con tu marido no tuviste orgasmo pero la pasaste bien no importa; lo cierto es que estuvieron juntos, se abrazaron, besaron, acariciaron, se dijeron cosas lindas y el amor sigue creciendo (con orgasmo o sin orgasmo).
Lo importante es estar juntos y amarse.
4-No tengo ganas.
Es común oír: “No tengo ganas de nada”, “Nunca quiero tener relaciones.” Pregunto:
¿Y cuántas cosas hacemos en el día que no tenemos deseos de hacer? Con el sexo pasa igual, aún sin ganas hay que practicarlo, cuanto más se practique nuevos deseos nacerán y hasta que se haga un hábito.
5- Mi marido no es cristiano.
Hace días oímos una revelación de Dios en una prédica del pastor Bernardo: cada vez que respiramos nombramos a Dios. Y en una relación sexual hay mucha respiración, muchas palabras que nombran a Dios. Por lo tanto una relación sexual siempre es cristiana y no tiene nada que ver que uno no lo sea.
6-Él no quiere tener más sexo conmigo, “no le atraigo más”.
Si el varón que no tiene deseo sexual es joven, deben consultar a un sexólogo que se lo solucionará rápidamente pues puede sucederle por diversas causas: estrés, una medicación que esté tomando, etc. Pero si el hombre tiene más de 45 años, es porque baja el índice de la testosterona, entonces se vuelve un poco más femenino, va perdiendo “el macho” que lo caracterizaba.
Y no es la mujer la que no tiene deseos sino el hombre que, tal vez sea más espaciado.
Dios hizo la sexualidad para que la disfrutemos.
Consejos para los hombres:
- No hablen durante la relación sexual.
- No sean ni delicados ni bestias, brutos.
- No miren una película subida de tono y enseguida quieran tener sexo con su esposa.
- Sepan que después de eyacular nosotras seguimos existiendo.
- Cuando le decimos algo lindo o los acariciamos es sólo eso, no queremos nada más, ¡no insistan, no queremos sexo en ese momento!
- Y teniendo en cuenta que “tu auto” estaciona en “mi garaje”: “Querido recordá mantener la cuota al día, estacionar siempre en el mismo garaje, que hay días feriados en los que el garaje cierras sus puertas, pero que hay otros días de estacionamiento, sin cargo, que son los días festivos y que siempre sos “bienvenido” pues, en definitiva para nosotras, el cliente siempre tiene la razón.
El sexo es fiesta y practicarlo tiene que ser una festejo (no de cumpleaños una vez al año). Dios quiere que lo disfrutemos todos los días y si no tenés marido, sublimá.
El Amor.
La palabra amor está muy mal usada últimamente, muy vapuleada. Decimos a nuestra pareja “te amo” y después usamos expresiones como: “amo este peinado”, “cómo amo las hamburguesas”, “amo esa ropa”, confundiendo el término.
En Cantar de los Cantares hay tres expresiones para referirse al amor:
- Rayá: que se refiere al amor de amigo, de compañero. Es la persona a la que le podrías contar cualquier cosa porque confiás en él.
- Ahabah: se traduce como un gran cariño, tan fuerte, que lo único que querés es estar con esa persona. Es un amor de compromiso, todo el tiempo estás pensando en él más que en cualquier otra persona, es un amor que te hace vivir con ella por siempre. Dice la Biblia que ese amor es fuertecomo la muertey lo único que querés, es expresarlo.
- Dod: Es el amor que acaricia, sexual, erótico. Por eso dice: Si el me besara con besos de su boca, porque es el amor que toca, que abraza y penetra.
Cada una de estas formas de amor son:
una llama que se enciende individualmente.
El problema surge cuando queremos encenderlas individualmente y recibir el calor de todas.
Hay matrimonios que viven por muchos años un amor “Ahabah”, es decir mucho compromiso, o “Raya” (amor de amigos) pero no tienen mucho “amor Dod”, no hay pasión, erotismo, ni sexo y, de a poco, comenzará a desparecer porque falta un área.
Otras parejas, sólo tienen el amor Dod, sólo se unen por sexo, por instinto, pero no hay compromiso, ni amistad, están un rato juntos nada más y, en ese tiempo, pretenden recibir el calor de los tres pero no quedan satisfechos porque estamos para más. Cuando el amor es sólo sexual traerá frustración: “Me acosté con ese hombre pero él no quiere compromiso”, falta el calor Rayá, Ahabah; siempre tendrás frío porque estás hecho para más. Por eso Dios dice que en el matrimonio, los dos serán una sola carne; está diciendo que es un amor más profundo que incluye espíritu, alma y cuerpo, y si además se une la llama del amor de Dios, crecerá, crecerá, crecerá.
Fuerte como la muerte es el amor.
¡Hay algo más profundo! La profundidad espiritual que se consigue sólo cuando Dios enciende Su llama y la une a las nuestras ardiendo en su totalidad.
Cuando tu esposo es tu amigo, tu compañero, hay un compromiso entre ambos, sueños y metas por lograr juntos, él te hace feliz y vos lo hacés feliz sexualmente, las tres llamas se unen y el calor es inmenso, y agregado al calor del Dios del universo, arderán cuando Dios arda.
Serás esa pareja que cuando las vemos, se ve a Dios en medio de ellos.
Dios quiere que ambos ardan y tengan Su fuego, entonces todo lo que hagan les saldrá bien.
No mires el pasado, Dios hace nuevas todas las cosas. Nunca aceptes algo menos de lo que Dios quiere para tu vida porque Él pensó en amor, compañía, compromiso y en una experiencia espiritual más profunda: las tres llamas del amor unidas a la llama del Espíritu de Dios